porqué...

¿porqué a veces todo parece imposible? a veces, lo que más queremos

¿porqué suceden las cosas que pasan, a quién no se lo merecía, a quién no lo buscaba, a quién lo tiene más difícil aún?

¿porqué...porqué tiene que ser todo cómo es?

quizás sean los exámenes, quizás sea el no dormir lo suficiente, que el frío hace que necesitemos más lo que nos falta, tal vez sea...es igual.

será que el último verano se escapó en otro metro, que en este vagón no sale el sol, que ayer no llamaste x teléfono, será que es temprano y no quiero ir al trabajo, será que tu olor no llega hasta aquí abajo... [isma]
...será que no entiendo porqué nuestra vida discurre como lo ha hecho, como lo hace...cómo no sé cómo seguirá...

La chica de la ventana [historia]

Las casas caían en cascada desde mis cristales por la colina, los tejados semejaban una escalera descendente que no acababa de terminar donde el crepúsculo claro unía todo lo que yo podía ver, en un punto de fuga inmenso. La oscuridad parcialmente iluminada al fondo por el cielo, quedaba recortada por las nubes altas y espesas, las ventanas llenas de sombras (incluída la mía, puesto que no había ninguna luz encendida en la habitación), los pájaros que a ratos rasgaban el horizonte en vuelos ágiles, y fugaces.
¿He dicho todas? todas no...tras unos cristales prendió una luz, como un farol en mitad de la más negra de las noches. Quedaba justo bajo el tercer escalón de tejas que yo divisaba, a mi derecha, exáctamente la sexta ventana ya que cada casa tenía sólo dos en ese lado de la fachada. Algo impulsó a mis ojos a fijarse en ella, abandonando su anterior ocupación. Los cristales refulgían en la penumbra como dos llamas, dos luciérnagas que se hubieran perdido y hubieran aparecido de súbito en aquel lugar tan extraño para ellas, otorgándole un haz de frágil belleza y misterio.
Como un caminante perdido, me sentí de inmediato atraída por aquello que competía con el último juego de lucres de colores de aquel día, en que la senda de las sombras de las casas parecían un camino difuso y mi mente simplemente vagaba, tal vez con otros mundos, mundos mejores, mundos de viajes y atardeceres infinitos.

No había cortinas en la habitación, lo ví claramente. El ángulo de la distancia no me dejaba ver mucho más. Deduje que sería un pequeña lámpara, una lamparilla de mesa la fuente de aquello. Esperé, no sé bien a qué, no esperaba nada, pero me quede quieta, como hechizada por algún encanto en el que no pensaba. Sin embargo mi curiosidad tuvo premio, a un instante no había nada, al siguiente una chica de ojos perdidos hacía el firmamento, apoyaba una mano en el vidrio, ausente.
Mi corazón dió un vuelco. Me preguntaba que ser habría obrado esa magia de entretenerme, y allí estaba, un alma como yo, tal vez de mi misma edad, morena y con una mano de dedos largos y delgados, tez blanca y ojos mirando a algún lugar el cual yo no adivinaba. No sabría decir si era guapa o no, no estaba lo suficientemente cerca y en cualquier caso, no creí que fuera una chica normal para esas etiquetas. Su indefinible encanto estaba justamente en que no se podía definir, ni siquiera parecía que estuviera allí, apenas a unos metros que eran como kilómetros de hielo.
Sencillamente no encajaba con el paisaje, la chica de la ventana estaba fuera de todo aquello en lo que yo y el mundo estábamos dentro, lo supe al percibir el conjunto de la imagen con la noche ya presente, en mis retinas, al no respirar apenas observándola, la curva de su barbilla, la postura de su mano, los mechones de su pelo, al notar su expresión, fría, distante, y a la vez como la de una niña abandonada en un lugar que no entiende.

Nunca la había visto antes. Mi casa sólo la habitaba yo y aquellos a los que alguna vez invitaba (amigos, familiares) o deshacían sin pudor mi cama y mi cuerpo. Ésto era nuevo para mí, sentirme atrapada por alguién que no conocía, ser incapaz de apartar mis pupilas de ella, desea únicamente saber su nombre, su vida, su alma, tocar aquella mano y entrelazar sus dedos con los míos...Sin darme cuenta estaba imaginando un sin fin de sueños al par que mi pulso se aceleraba. Era imposible que no la hubiera visto jamás, era inaceptable haber vivido tanto tiempo sin conocer su existencia. Mi pupilas la recorrían inquisitivas, tratando de averiguar en un intento absorto e inútil qué pensaba alguien que prefería quedarse en casa divagando, mirando el crepúsculo y después las estrellas en vez de salir, correr por las aceras, reír con los amigos, conquistar y mentir como hacen todos.
Entonces, de repente, desapareció. Igual que había llegado se fue, y mi respiración paró en seco. No, me dije, tengo que saber algo de ella, no puede irse todavía. Lo normal habría sido que hubiera seguido con mis asuntos, con mi vida, que hubiera esperado a verla otro día o como una persona común hubiera tocado a su puerta con cualquier excusa. Pero si no hice nada de eso fue porque la luz de su ventana seguía encendida.

Algo muy fuerte me impulsó a abrir la mía de un golpe y a pesar de sentir de lleno el frío en la cara, sacar fuera medio cuerpo con las manos apoyadas en el quicio y gritar.
- Ehhh! eeehhhhh!!...no puedes irte! no puedes irte aún!...eeehhhhh!!!!..sal otra vez por favor!!!...sal otra vez...eeehhh! la chica que estaba hace un segundo en la ventana! sal por favor!!...
Me quedé sin aliento y un tanto afónica. Una parte de mí no sabía por qué demonios estaba haciendo aquello, mientras el vaho se elevaba de mi boca al viento, y la ventana continuaba vacía. No, pensé, irracional.
- La chica de la ventana!!...la chica de la ventana!!...eeeehh...vuelve a salir por favor!...
Nunca pensé que fuera a salir. Cuando ya no podía más, y miraba la luz muerta de su ventana sin fuerzas, sin razón, como una muñeca desmadejada, volví a verla. Apoyó esta vez la otra mano en el cristal contrario y alzó curiosa la mirada hacía mí, la chica de tres casas arriba que se desgañitaba como una loca. Recuperando la respiración noté que sus mejillas tenían surcos como de haber llorado, y sus ojos tenían un brillo extraño; si hubiera podido clasificarla de alguna manera existente, habría dicho que era la chica más guapa que recordaba haber visto. De pronto sonrío, y yo sin saber porqué sonreí a mi vez. Fue un momento íncreible.
Me hizo una seña con el dedo, como si me invitara a seguirla al interior de la habitación donde volvió a desaparecer.

Podría ignorar todo esto, pensé. No tengo porqué ir. Pero cerré los cristales, bajé de un salto las escaleras y salí a la calle después de meterme las llaves en el bolsillo de atrás de los vaqueros.
En un par de zancadas en la acera estaba frente a su puerta. Respiré hondo y toqué al timbre. Los segundos fueron eternos. Por un tiempo no recordaba nada, nada tenía importancia. Abrió la puerta. Entré.
La casa era cálida, y de inmediato supe que se encontraba vacía salvo por nosotras dos. Nos miramos, sin decir nada, sin saber qué decir.
Fue ella quien rompió el silencio.
- Sube -me dijo.
Detrás de ella subí lentamente los escalones, fijándome en cada detalle en que podía, las lámparas de cristales de colores, los tapices de indios y amaneceres colgados de las paredes, los libros por todos lados, y sobre todo ella, su ropa, su estatura similar a la mía, las sensaciones que me inspiraba; era como si ya hubiera estado allí antes, como si ya la conociera, como si hasta ese momento no hubiera sabido que existía alguien que me hacía sentir todo aquello, sin saber absolutamente nada de ella.
Penetramos en su cuarto, de ambiente igual al resto de las habitaciones por las que había pasado, con cosas africanas, colores hippis e indígenas, cientos de cd's de música. Allí se detuvo de frente a mí. Yo no sabía cómo actuar.
- ¿La has decorado tú? -le pregunté.
- Sí, vivo sola
- Me encanta...es...
Se rió.
- ¿Qué? jejjeje...-volví a preguntar.
- Tendrías que verte la cara que tienes
Me sonrojé, y me reí yo también para liberar la tensión.
- Siento haberte llamado así, es que...bueno, te había estado observando ahí en la ventana y te fuiste, y no sé qué me pasó...lo siento, no sabía que fuéramos vecinas
Hizo caso omiso de mis disculpas, por el contrario empezó a hablar y mi asombro creció veloz.
- Hace tiempo que sé que vives ahí. Te he visto muchas tardes mirar el atardecer, con mi luz apagada. Me preguntaba quién serías, qué harías...qué pensarías ¿es curioso, no?, y hoy tú me has visto a mí por primera vez, sin saber que yo ya te conocía, y te has puesto a pegar gritos para saber quién era yo. Gracias
- Yo...no sé que decir
- Lo imagino, a mí tampoco me había pasado nunca algo así
De repente recordé algo.
- Estabas llorando ¿verdad? cuando te fuiste de la ventana
- Sí
- ¿Porqué llorabas?
Sin darnos cuenta, o al menos yo no me daba, nos habíamos ido acercando más, hasta casi poder rozar mis manos con las suyas.
- Iba a matarme, era el último anochecer que veía
Entonces reparé en las cosas que había encima de la cama, un bote cerrado de pastillas y unos pañuelos.
- Cuando te pusiste a gritar llamándome iba a abrirlo -dijo siguiendo la línea de mi mirada y centrándode nuevamente en mis ojos-, al principio no iba a hacerte caso, no me conocías, no sabías nada de mi vida ni del dolor que siento por que no es la vida que hubiera querido vivir, sólo eras la chica de la ventana...que acompañaba cada tarde de vez en cuando mi soledad desde aquí, pero...-insconcientemente tomé una de sus manos entre las mías- seguiste, seguiste a pesar de que yo no salía, de que hacía frío y no me conocías. Eso me hizo pensar que tal vez aún había cosas -entonces apretó mis manos con la suya y esbozó una sonrisa directamente a mi corazón- que merecía la pena conocer, y vivir para ello.
Le acaricié la cara con la otra mano, suavemente. Realmente era preciosa.
No sé cuánto tiempo pasó mientras estuvimos así, con las manos cogidas, mirándonos, recorriéndonos con las mirada.
En algún momento le dije:
- Vamos, enséñame tu casa, enséñame tus cosas, háblame de tí, cuéntamelo todo.
Y ella me dijo:
- Ven

/x Atlanthis/
Dedicado a tod@s l@s soñador@s como yo, que creen que los sueños aún son posibles.

Gotas que caen sobre los charcos...evening falls

No me van a hundir. X mucho que lo intenten, x muy difícil que lo tenga...no me van a hundir.

Tengo una vida llena de oportunidades para vivir.

Enya - evening falls

Luz

......lo que me hace falta

................

Niebla

...Atchisss

Jesús; ya me lo digo yo sola, no os preocupeís que x aquí no salpica, jeje. Afuera está lloviendo, y hace frío...y con la niebla y las gotas de lluvia hace un día precioso.

Ahora que estoy de éxamenes, pienso yo...que hay algunos tipos de preguntas de éxamen tipo test que siempre te encuentras. X ejemplo...

En casi todos los test se repite la pregunta aquella que nos habla del nombre de un tío, x poner un tal Weiss o Karl o James (de éstos hay muchos), el cual con todos los respetos no te suena de nada. De pronto una especie de corriente eléctrica te eriza el vello de la nuca, poniéndote un pelín nerviosa. Vamos a ver te dices, hay muchos que se llaman como éste tío, es normal que así x las buenas no sepa quién es el fulano...

X supuesto, encuentras una solución a la justa medida del problema que tienes...levantas la vista unos renglones y te quedas mirando, fijamente -como si fueras a movérsete la tinta del folio) al nombre del tío...un buen rato, no vaya a ser que la palabra te susurre algo y tú estés despistada y no lo oigas. Como si te fueras a encontrar ahí la respuesta correctas. Que no, que estás lenta. Vuelves a leer el enunciado completo...luego la fecha...luego el nombre del tío otra vez...luego la fecha...el nombre...la fecha...las alternativas...la fecha...
En fin, que dos horas y media después -aunque tu relog sólo marque que han pasado 7 minutos- decides que al final del todo la vulves a mirar...a ver si cuando hayas contestado más preguntas ha bajado algún ángel y ha hecho el milagro.Con todo...el malvado fantasma de Weiss y Karl y James te persigue toooodo el examen...
uhhh

Qué ganas tengo de irme de aquí...a África, que sí, me hace gracia mi amiga L. chinchándome con que si es que me ha dado muy fuerte la filosofia budista (no sé que entenderá ella x eso, pero fins...), si es que ya le mandaré postales...Jeje, con suerte cuandoe sté allí tiraré el móvil y la mitad de mi racional mente occidental, tan políticamente correcta. Bueno, es un decir, pero que es aconsejable alejarse de todo a veces, lo necesario para recuperar la perspectiva...osea, el horizonte real, aunque a veves no haga falta poner kilómetros x medio, otras sí.

La verdad que esa especie de alejamiento la vivo en una ínfima parte los domingos cuando me subo a alguna montañita durante 5 horas y bañada en sudor, cansancio y paz, observo el silencio, la hierba, el distanciamiento. Lo cierto es que es totalmente genial, además de precioso el contacto libre con la naturaleza...
Antesdeayer estuvimos en una de las zonas de la Alfaguara de mayor tragedia republicana...unas sierras que todavía están repletas de trincheras, casa matas, barrancos x los que los franquistas los fusilaron. Es curioso, porque la tierra roja de Graná en algunos puntos de allí es más roja todavía...hay terrones de bermellón puro.
Fué algo extraño...entrar entre las piedras donde tantos hombres apoyaron su fusil y tiñeron la historia con su sangre defendiendo lo que era suyo...casi podías imaginártelos bromeando para vencer el frío de la espera, rodeados de encinas, con las nieves blancas de Sierra Nevada al fondo. Penetrar a oscuras en el estrecho laberinto de una casa mata (para quien no lo sepa, eran una especie de fortificaciones con muchos muros interiores para amortiguar las explosiones que provocara el enemigo y dificultad su acceso a las mismas), respirando x unos minutos el aire viciado, sintiendo la memoria de esas paredes, apenas de hace 50 años. Supongo que entiendo, entiendo lo que les quitaron, creo que de forma injusta, como son todas las guerras.
Los Rojos. Me quedo con lo que dice Isma.

Ismael Serrano - Papá cuéntame otra vez (principio de incertidumbre)
Aute - A x el mar (auterretratos)

Cosas...

Todos intentamos sobrevivir.

Mentira quien diga que no necesita a nadie, que no se arrepiente de nada, que ya encontró lo que buscaba.
Yo quiero no necesitar a nadie, no arrepentirme de nada de lo que he hecho, haber encontrado ya lo que buscaba; pero a lo mejor miento.

Si esos barcos de ahí llevaran a algún paraíso difuso tras el alba del cielo, si pudiera subirme a una almena de la Alhambra y gritar a la noche, a la ciudad, todos mis pensamientos, toda mi voz enervada con mi alma en el aire, y yo también fuera un poco azul, un poco viento, un poco libre.
Porqué no, ser una princesa árabe que cogiera su yegua blanca del Generalife y recorrer los empedrados de las calles de Granada a toda velocidad.

Hay gente que habla de las decisiones, y lo hace en términos de caminos extrechos o cortos y caminos anchos o largos...Y se equivoca. O al menos pregunto, ¿cómo se distinguen, a simple vista, cuando supuestamente tienes que escoger?, pregunto, ¿cómo se sabe cuál es uno y cuál es otro?. Yo no lo veo. Yo quiero seguir una vía de tren en alguna extension perdida andando x entre los raíles, a pleno sol, hasta que me canse de ver la hierba que crece a los lados o llegue a algún sitio donde quiera quedarme.

Yo quiero encontrar una chica normal, alegre, que sólo quiera disfrutar de la vida.
No pido tanto.

He leído que en un libro comparaban a la Pantoja con Mozart. He visto arcoiris absolutamente perfectos. Me he reído muchas veces hasta no poder más. Y no sé qué me pasa, que necesito x una vez en la vida desprenderme de la melancolía como algo tremendamente vital.
Tengo ganas de sonreir, de alegrarme, de soñar sin dolor, de saltar en mitad de cualquier suelo sin ninguna razón y sentirme bien al ver que no alcanzo a rasgar una nube con las uñas de los dedos.

Necesito construir un futuro.

Hasta la vista, hasta luego, yo nunca digo adiós. La esperanza es ese azul que siempre brilla.

Cuando estás triste los relojes tendrían que parase, habrían de llorar los poetas, y apagarse el sonido del mundo. Pero nada de eso se detiene.

Y qué más dá, qué importa nada, si al final es igual...porque sigues viviendo. Porque a pesar...sigues viviendo. La ilusión no acaba de dormirse; bendita sea, loca.

Estudiando

Esta tarde ha habido contra los muros de la ciudad y las aceras grises, un atardecer descomunal. El firmamento era una extensa pradera roja, roja sangre, recortada x retazos oscuros y montañas negras.
El cielo parecía un infierno.

Una de las cosas x las que más me jode estudiar los días antes de los exámenes es porque no puedes hacer nada, ni ir al cine con la gente, ni tomarte un café, ni asistir a un concierto al que te invitan como a mí está noche. Es una mierda, tener que quedarme en casa mientras fuera la vida ocurre y se regala y fluye y se llena, con mis apuntes y mi música. X no decir el aspecto de ida que tengo, jajjaj, con tanto que tengo que meterme en la cabeza en tan poco tiempo.

A menudo creo que utilizar los puntos suspensivos es la forma de expresar más sin decir nada...algo así como la mirada, el brillo de las pupilas y de los iris, puede llegar a decir cosas infinitas, a besar, a bastar.

Esta es la música con la que estudio esta noche. Se bajan en calidad de radio. [no son ninguno de los singles de kate ryan]
Kate Ryan - track 16
Kate Ryan - track 12

Lestat, los cambios del blog principalmente se hacen en dos plantillas, en main index los de diseño html para la página principal y en stylesheet para los colores, fondos y tipos de letra. Los colores son los que hotmail utiliza para escribir emails (los códigos) y el html lo mejor que puedes hacer es buscar x internet una guía fácil para ello.
Creo que somos almas parecidas, sí. Tal vez puede que hallamos vivido cosas o circunstancias similares, no lo sé. Yo soy una chica extraña x naturaleza; en cualquier caso siempre he creído que encontrar gente como tu o con la que conectas de alguna forma, da color a la vida y es algo especial. Supongo que a todos nos pasa alguna o varias veces...
A veces soy la mujer más masoka de este universo, pero la verdad es que...no lo cambiaría. No sé exáctamente porqué, a lo mejor son muchas razones, o a lo mejor es sólo una.

esos estados de la existencia que a veces nos encuentran

Estaba pensando, entre nervios de éxamenes inestudiados, incertidumbres que me vuelan, pensamientos que revuelven mis estados emocionales, películas recientemente vistas en el televisor -como El Pianista de Polanski, muy buena- y canciones de Isma -que yo también comparto los mismos miedos, también busco una cinta para atar el tiempo, también arrastro una cadena de sueños, un día la vida echará abajo tu puerta, rendida, acorralada te pedirá cuentas x este fracaso, x haberme mentido, déjate convencer, duerme esta noche conmigo, que el amor se encuentra antes si se busca, mira que casualidad si yo fuera tu hombre y la duda de haberte dado luz no te deja dormir nunca-.

A alguien le oí una vez que no se puede vivir evitando la vida. Otra vez alguien dijo que las únicas armas tendrían que ser los besos.

Leí que el fin es comienzo, y el comienzo un fin. Duermo x las noches, me despierto perezosa y me rasco la cabeza dándome cuenta de que llego tarde, a clase, al carnaval del mundo, al amanecer que hace rato se dispersó del cielo. Bon Jovi dice en mi equipo que estos días las estrellas parecen inalcanzables (these days the stars seem out of reach), Sherezade hace días que no tiene tiempo para cuentos, Wendy sueña desde su ventana que esas luces no lo son y se calla para no mentir el porqué ya no puede volar.

Los apuntes se cruzan x mis dedos y la tinta se desliza fugaz ante mis ojos, en trazos ilegibles, conocidos. El cansancio caliente me acerca a la cama lentamente, las fechas se suceden indomables x el almanaque y mis razones. Irracional o racional deja de tener sentido, los cables internos que me dan cuerda se agitan al compás del viento, bailan, me recuerda a un puente tareando melodias con la brisa que lo mece. Los horizontes se funden. Los cielos anochecen. El relog marca la hora en que la escalera sostiene el zapato de Cenicienta y Ulises delira sobre Ítaca, es momento de hilar vestidos y quemar las naves. La luz del flexo se mueve y mis ojos se quedan quietos, se escuchan, comprenden la mente que les sirve de guía, su silencio; el palacio de invierno está cerrado, las brujas miran al firmamento sin prisa mientras el fuego arde, shakespeare esnifa al par que la vela se consume. Ahora, en este momento.

La verdad, la verdad lazaro, es acaso algo terrible, algo intolerable, algo mortal. /Unamuno, de San Manuel Bueno Mártir/

El hombre está condenado a ser libre [...] el misterio del hombre, es pues, el de su libertad. /Jean-Paul Sartre/

El atardecer...

Ya sí tengo la foto...

Necesito hablar...

Decir, no sé, que mi vida está cambiando, y que es la primera vez que eso me gusta, y que yo lo dirijo.
Tal vez cuando más me estoy siendo fiel a mí misma.

Me duele, pero estoy aceptando el sentirme muy dentro de mí, sola. El ser tan inhumanamente sensible.

Estoy dando mis pasos con tranquilidad, creciendo, no es que antes no lo hiciera, pero era distinto, no era tan consciente, ni tan místico, ni...tan lleno. Antes yo lo quería todo, y si algo fallaba me moría. Ahora no me preocupan tanto los fallos, sé que son para aprender; no me importa no tenerlo todo, sé que tengo que hacerme fuerte, sé que alguno es mi camino.

Me duele muchísimo la cabeza. Y me quema la garganta, estoy comenzando a marearme; Tengo que tener bastante fiebre.

A tí, si de verdad me lees siempre y ahora lo haces, después de éste sábado, sólo quiero decirte que espero que seas feliz, que yo sigo mi camino, que sé que nos volveremos a cruzar en algún punto.

Tal vez todo cuanto me ha pasado tenía que pasarme. Es bello vivir a pesar de todo; quiero recordarlo.

Ayer disfruté mucho con mis amigos, los de siempre y los nuevos. Especialmente kiero decirle algo a mi paisa...hoy que estoy hipersensible, y extrañamente clara en mis pensamientos... que siempre desde que la conozco ha estado en las buenas y en las malas que han sido muchas, y eso no todo el mundo lo hace...Te quiero mucho, ktta, aunque no te lo diga. Tengo guardadas ciertas flores, con un lazo de plástico transparente, que me diste cierta noche, y me llegaron al corazón.

No sé, voy hacia adelante, que es mucho. Espero que bien.
Cuando me dá x estar filosófica....

Sobre un día

Cuán incompletas son las palabras. Siempre lo pienso, pero no deja de ser algo que me sorprende; y ahora mismo, me golpea.

Cómo explicar...cuando unas horas son casi pefectas, y todo parece una película, tal vez sí, al sonido de Cavatina, en el horizonte de un mar azul inmenso.
De los instantes deskojonantes sé que hablareis vosotras, o no, pero os los dejo. Han sido geniales (el trío, la maceta, la cabra).
Es más, ¿me dejais que os diga algo, a lo que no espero comentarios x vuestra parte? haríais una pareja perfecta.

Este post se merecería esa foto del atardecer en la playa que ha sido increíble, si la tuviera, ya que mis palabras hoy no están a la altura. ¿Sabeis? como escritora siempre quise retener en palabras aquello que veía o sentía, pero no se puede, nunca nadie pudo, y nunca nadie podrá; x eso escribir es algo inútil e inmensamente bello. X eso realmente ninguno somos escritores, y aun sabiendo que es un fracaso, seguimos luchando.

Sucede...que en este día he entendido a nivel personal muchas cosas...y es una sensación de estar envuelta x algo completo, algo extrañamente fuera y dentro de mí, algo demasiado grande para agarrarlo. Cuando estaba delante de la espuma. Del sol reflejándose en el mar. En el coche, en silencio.

Si hubiera estado sola, hubiera llorado increíblemente al oír las dos veces esta canción que me ha rajado x todos los rincones de mi alma..."Fugaz, la ví caer, fugaz, del suelo al sol, fugaz, la ví encender, fugaz, y se durmió. Quizás, nunca la ví, quizás, nada calló, quizás, no te perdí, quizás, ya despertó. Lo sé, que estás aquí, yo sé, riéndome, yo sé, que no te ví, yo sé te extrañaré. Fugaz, pasó el amor, fugaz, guiándome, fugaz, sin voz, fugaz, te seguiré.", siendo estas palabras que acabo de decir, insuficientes para expresar, lo que yo sentía. Siendo totalmente vacías para decir, lo llena y vacía que me encontraba a la vez.
eigual no sabes lo que me has regalado; posiblemente la bso de uno de los días más especiales de mi vida, con dos de las personas más especiales que he conocido, aparte de un cd que no hace falta que te diga que soñaba con tener desde aquella tarde en el banco, tu y yo alucinadas, oyéndo.

Desde ese momento me he ido...¿qué pensaba en el coche?...pensaba que en cuanto llegara a casa y lo volviera a escuchar iba a llorar -como ha sido-...que me parecían esos momentos en la carretera con el crepúsculo y vosotras inmensamente bellos -es tonto, ya lo sé, pero mentiría de otra manera-...que uno de mis pensamientos frente al mar era equivocado, pero que no cambia las cosas, y tal vez mi destino con ella sea el que es, y haya hecho lo mejor al borrar los mjes, al querer dejar de pensar, al querer vivir y dejar al tiempo construir lo que tenga que construir...que soy verdaderamente la mujer más extraña encima de la tierra, porque mi felicidad es siempre un poco melancólica, y mi tristeza un tanto masoka...que se me estaba rompiendo el corazón con esa música y esas nubes y esas montañas...que se me estaba rompiendo...
Que se me estaba rompiendo.
Y me daba igual.

Gracias x este día, a las dos. A una x su simple existencia en el mismo mundo mundo que yo, sacando videos, fotos de todo, jajjaja. A otra, porque a veces me pregunto cómo puede existir alguien como ella en este mundo, x las horas fantásticas de hoy, y las que quedan, x todo.
Necesito deciros, yo que estoy cambiando mi vida, yo que soy extraña y ahora más, yo que tal vez ninguna de las dos realmente me entienda o acaso me conozca, que os quiero muchísimo.

Hoy...ha sido un día mágico.

Fugaz.

21...ya, qué extraño

X fin tengo en mis manos el original de principio de incertidumbre de Isma..., podría decirse que es quien me está acompañando a estas alturas de la noche, celebrando conmigo, que cumplo años y recuerdos...que queda atrás cada vez más la chica de 17 años que era. Estoy casi infinitamente triste...x razones que es difícil escribir.
21...ya, es extraño. Solos únicamente Isma y yo.
Qué extraño es todo.

de madrugada

pues eso, que están mis padres en sevilla haciendole pruebas medicas a mi madre, que he estado hasta las 4.20 de la mañana hablando con la compañera de T. en el piso (una conversación sobre los piercings, la iglesia, la homosexualidad, la infidelidad y las relaciones...una conversación bastante trepidante, de la que he perdido la orientación, las palabras, lo que he dicho y porqué), y me he metido en vaqueros encima de la cama despierta hasta las 5.47 de la madrugada, y me he lavado la cara y he llamado un taxi y he llegado a mi casa vacía y me he tomado un vaso de zumo de naranja nada más llegar. que tengo una cierta claridad en la mente extraña, un despejamiento distante, y a la vez una confusión íncreible, que ya le he abierto la reja a los albañiles para que puedan seguir trabajando a las 8, y yo, habiéndome cambiado de camiseta y vaqueros, voy a meterme así mismo en la cama, porque tengo la extraña sensación de no saber qué ha pasado con el tiempo y mi cabeza en las últimas horas.

No sé qué coño me pasa hoy II

Clavos ardiendo
me atan
a una atmósfera indivisible,
Satanás juega
con mi sangre,
volver a verte me parece
un jamás amargo.

Me haría falta
que me enseñaras,
el olvido de todo
con tu única existencia,
las playas desiertas nocturnas
en la marea vertida de tus piernas
unida a mi cuerpo
frágil,
la luz del universo
subida a la montaña
más alta de la tierra
reflejada en la belleza infinita de tus ojos.

Necesitaría cantar
todas las estúpidas canciones de amor
que me sé
con mis manos susurrando
entre las curvas de tu piel
y mis labios deshaciendo tu pelo.

¿Sabes? juntar todos mis versos
y tirarlos x la ventana,
gritar como una descosida
todas las mentiras
que he dicho alguna vez,
arrojar a las llamas
frías del invierno
mi alma desnuda de secretos,
sería igual que cerrar los ojos
y dormir,
si el sueño eterno
que agarrara entre mis brazos
fueras tú.

Desgajaría trozo a trozo
mi corazón como una naranja
con la navaja que tomara
del ángel o demonio que me sostuviera,
me es indiferente,
si tuviera dos o tres instantes
para derramar las mil imágenes de amantes
de esas películas románticas,
sobre tí y sobre mí,
enlazadas en cualquier rincón bajo el firmamento
yo absorta,
absorta en la belleza de tu tacto
recorriéndome.

Debería de haber encerrado tu saliva
en un tarro de esos de conservas
herméticos, que nunca dejan escapar
lo que los labios terminan de besar
y miran alejarse
tantas veces sin querer,
lo habría guardado con mi vida
para echarte de menos
de una forma más masokista aún.

Un mechón de tu pelo,
una pestaña negra,
un olor de tu sexo,
tendría que tenerlos
para hacer brujería,
encender el caldero y echar
dentro mis huesos vacíos,
a ver si así pudiera volver
a darte un beso,
una caricia,
sólo uno, sólo una,
sería una magnífica cadena
ambiciosa x toda la eternidad
de mis ansias, de mis lamentos,
de mi mente
que no me deja en paz,
que no me deja tranquila,
que me amenaza con la guillotina
de la razón
si mis terminaciones nerviosas
no estallan ante tí
al menos una vez más.

Es que tendría
que haberte dado mi cuerpo,
para que te marcharas con él.

A mi no me vale,
no me sirve sin tí.

Si vieras reíse a las estrellas,
al mismísimo ángel negro,
a todos los caídos que me contemplan
hundir las muñecas
hasta la inmortalidad
del recuerdo que me dejaste,
creyendo que ni siquiera tú eres imposible,
si oyeras las carcajadas
como campanas en honor de ésta tonta,
ésta ímbecil que vendería sus sueños
x tí.

Sería bueno darme unas ostias,
no de las que podrían gustarme
sino de las otras,
para destrozar las novelas de amor
que nunca leí
pero que creo,
y quemar de paso estas líneas
que hacen lo mismo
muertas que vivas,
soterrar las voces
que me hablan,
darme unas ostias bien dadas
no de las que podría pedir
medio ida que me dieras,
las que terminarían de acabar conmigo,
porque es peor esta ignorancia,
este silencio,
porque es peor esta condena
de nada,
que el martirio de asesinar
de un tajo a mi corazón
perdiendo mi cuerpo
al llevártelo tú ya entero
en un adiós apasionado
que me queme,
que me reduzca a cenizas,
que x amor de Dios acalle a mi memoria
y me mate del todo.

Habría sido aconsejable proponértelo,
con suerte bendita
te hubieras quedado atrapada
entre mis brazos,
y no estaríamos ahora
mirando perplejas esta poesía,
tú dudando si es a tí
a quién dirijo mis delirios,
yo gritando para mis adentros
de que lo dudes,
y no respondas,
y no me calles
llamando, reteniéndome a tu lado.
Pero se me olvida que sólo yo
fuí lo suficientemente gilipollas para enamorarme,
o algo así piensas.

Escrito hace unos instantes a la luz de una cerveza. Poesía de delirios es el título.

No sé qué coño me pasa hoy I

Tendría que estar alegre x que el sábado sea mi cumpleaños, pero no lo estoy. En absoluto

Y ya que le he cogido a Aute el título de este post, dejo unos enlaces a canciones, que no dejo de escuchar.

Aute - De tripas, corazon
Aute - Sin tu latido ...ay amor mío, qué terriblemente absurdo es estar vivo, sin el alma de tu cuerpo, sin tu latido...
Aute - Al Alba ...si te dijera amor mío que temo a la madrugada...
Aute - El universo...el mar se deshacía mojando tus caderas, la arena entre tus labios jugaba con mi lengua, y empapados de agua y luna, enlazados cuerpo a cuerpo, recorrimos las espumas hasta el fin del universo, donde nace el universo, cuando estalla el universo...tu piel eran chispazos de mil aguamarinas, tus pechos me miraban como ávidas pupilas, tus muslos extendidos tenían cierta prisa, tu pubis era un beso fundido en mi saliva...
Aute - Dos o tres segundos de ternura ...estoy pasando un bache, un revés, un agujero...

La filmoteca de mi padre

Este post iba a ser otro. Pero algunas circunstancias han cambiado. Acabo de ver una película que me ha revuelto el estómago, y acaso el alma.

Mi padre está comprando filmes en vhs y dvd como un loco, va, mira las ofertas y añade a su colección; pero no las ve, y no sabe lo que está comprando. No sabe lo que compra cuando lo hace.

Tampoco sabe que yo las veo, dicho sea de paso. Tengo bastante más tiempo que él, y una insaciable curiosidad cinéfila. En fin, que observo sus últimas adquisiciones y pongo en la tele la que más interés o morbo me suscita. Así ha terminado en mis manos Lunas de Hiel, de Roman Polanski, prohibida durante un tiempo en américa ('91) y censurada después.

En fin, tengo ganas de vomitar. Y x otra parte algo en mi interior está absolutamente inquieto.
Ya sentí algo parecido hace algo más de un año con Asesinato en 8mm, aunque entonces fué un rechazo más visceral, más repugnante. Aquella si bien hiere más un tipo de sensibilidad (y es más extrema en las prácticas sexuales que refiere, más sangrientas, con tíos corriéndose con videos eróticos de muertes), suscita más facilmente una negación que si bien te da asco no se te retuerce tanto x dentro; no sé, presenta sólamente el extremo del horror en que puede convertirse el sexo, y x ello te sientes menos implicado con lo que estás viendo, puedes dar una respuesta interna más unitaria y más radical.
Con la obra del señor Polanski no. Aunque me dé vueltas la cabeza reconozco que es un gran director.

Es una putada de película, no sé si habría preferido verla o no, pero ha caído en mis manos y me ha revuelto x dentro, es una putada.
Mezcla el infierno sexual y personal de cuando toda dignidad y alma se prostituyen, se arrastran, y una axfisiante y enferma dependencia que se puede llevar a cabo entre personas. Más, todo eso de una fomra muy íntima, personal, que habla al oído de cada espectador y se mete x dentro de sus secretos, de sus propios recovecos del alma.
Podría haberla cortado en cualquier momento, pero tenía que ver el final, sencillamente, tenía que verlo.

Ahora mismo yo no sé explicarme. Suscita una profunda repulsión ante una relación tan sádica, cruel y dependientemente enfermiza; al menos a mí. Ahonda demasiado en mis temores sexuales (creo que una relación puede destruirse tanto x deficiencias de sexo como x exceso en cuanto daña humamente a las personas), e incluso en mis fantasías...que no dejan de ser además de románticas al más puro estilo así entendido, como profundamente sexuales en donde casi todo vale, y mucho más lo que satisface los deseos más íntimos y escondidos de mí, x lo que, en contradicción horrible, no deja de producirme una cierta excitación en algunas escenas. En fin, considero que sexualemente vale todo siempre y cuando las personas implicadas se sientan bien y no con su dignidad hecha mierda, pero en el ámbito general estas dos películas se pasan de ese límite, más la primera que la segunda en un aspecto, y más la segunda que la primera en otro.

Te hace sentir mal. A pesar de ello merece ser vista, es buena, muy buena, quizás el problema es que lo es demasiado; transmite demasiado bien la sensación que se quiere transmitir. No sé, me dan miedo las relaciones en que las dos personas se autodestruyen y a los que tienen alrededor, en un círculo vicioso de sexo o amor mal entendido, dependencia y mierda.
Con esto no digo que no se puedan probar cosas, más aún, que no se deba dar rienda suelta a tus necesidades sexuales y afectivas con tu pareja; pero sin que sea destructivo.

A todo esto mi madre no deja de recordarme lo gilipollas que soy, lo mal que hago todo y el estorbo que soy. Una mujer que sabe levantar los ánimos, jeje. Y me he cortado en un dedo con un cuchillo, casi me lo llevo (me tenía desconcentrada). Aún así no voy a decir que ha sido un mal día; no, la verdad que no.

Brindemos que hoy es siempre todavía...

No era muy tarde, yo volvía de la calle, de cenar con eigual (x una vez me ha dejado invitarla yo), la parada del bus estaba sin luz y la calle casi vacía. Iba andando entre las sombras de la noche con mis botas, mis pantalones verde militar de senderismo, una camisa a cuadros azul y grises, mi chaqueta destrozada de cuero negra y una bufanda a rayas multicolor...tarareando una canción de Isma, mirando los aparcamientos de coche, donde un fiesta rojo antiguo descansaba al lado del portal. He aprendido con los años a aceptar los vuelcos de mi estómago, aún así al pulsar el botón del portero para que T. me abriera, me temblaba visiblemente la mano.

Subiendo las escaleras (nunca cogeré un ascensor), iba dividiendo mi mente en dos partes, una recordando voces, manos, sensaciones en esos mismos escalones con ella, otra luchando x mantener a las dos en blanco.
T. me había dejado la puerta entornada. Este piso trae recuerdos, de otros paisajes otros tiempos, en los que una suerte mejor me conoció, pensé parafraseando a Isma.
- Ven un momento, quiero enseñarte algo
Entré a la habitación, tenía un montón de ropa sobre la cama. Sus regalos de reyes dijo.
- ¿Te gusta? dime la verdad, luego no te metas conmigo porque no me queda bien lo que llevo
- Sí, esa camiseta no, pero el resto sí, estoy segura de que te va a quedar muy bien
No es que no me estuviera fijando, es que era uno de esos momentos en que una parte de tí actúa sin que tú lo pienses demasiado; era verdad, pero yo estaba mirando algún punto impreciso entre su pelo y pared que había detrás, estaba ligeramente ausente, ardiendo x la calefacción a la que estoy tan poco acostumbrada, con un incipiente dolor de cabeza y de cuerpo en general.
- ¿Has visto mi bufanda ésta? estoy pensando en ponérmela mañana
- No, esa bufanda no
Me salió más abrupto de lo que me hubiese gustado, si hubiera podido controlarlo, que no pude. Algo en mi ser empezaba a dar vueltas, a girar.
- ¿Qué le pasa?
- No...guárdala en el armario, no te pega, no te pega T.
- ¿Estás bien?
- Sí, claro...es la calefacción -me pasé una mano x el pelo- creo que me voy a tomar un Neobrufen
- ¿Entonces la guardo?
- Sí, x favor
- Nada, tía, no me dejas que me ponga nada, que jodía eres
Me parece que en ese momento yo ya no estaba allí, al menos en ese momento temporal. Pero tampoco quería eso, de nada me serviría contener mil escalofríos incontrolables revolviéndome x dentro, al recordar que hicé con esa bufanda, qué pasó...cuando el fiesta rojo en la puerta, cuando no em temblaba la mano porque no había portero al que llamar, sino una llave en mis dedos encajándose en la cerradura y mil mariposas en mi estómago, al lado de alguien que se econtraba muy lejos de esa habitación, y de esta ciudad.

[...sigue leyendo pinchando abajo si kieres]

Pasó la noche, y entre gilipollez y gilipollez de fresita en la tele (esa chica se puso orgásmica al ver a la gente que la aclamaba x ganar), yo me tomé el Neobrufen, no me hizo nada (me dieron ganas de meterme debajo de la ducha fría pero estaba demasiado cansada), llegó la compañera de piso de T. de vuelta de Madrid y ella cayó en la cuenta de que mi cama (la cual ocupo de vez en cuando) estaba sólo con una manta.
- Vente a dormir conmigo
- No, estaré bien, no me hace falta más nada en la cama
- Ven y duermes conmigo en la cama, si eres un encanto, no te mueves ni ná
Si me muevo, pensé para mí.
- Que no, que no te preocupes
- Joer tía, ¿estás extraña, eh?
- Prefiero la habitación donde estoy...la cama...bueno, tú sabes -ceja enarcada, del que ya todo lo ha dicho de lo que podía contar hace mucho-
- No si...qué niña...¿y eso que tiene que ver? que estuviérais ahí
- No es sólo x eso T., no...-cómo explicarle que no me apetecía en absoluto dormir en aquella cama de matrimonio o en ninguna otra, con nadie que no fuera la última persona con la que lo hice-...no me encuentro bien, no creo que esta noche duerma, voy a ser un coñazo, mejor duermes sola
- Está bien
Últimamente siempre le decía lo mismo.

Serían las 00:30 de la madrugada cuando me tumbé en la cama, bocarriba semi a oscuras, encima de la manta sudando, con una tormenta de nervios en el estómago inexplicable porque no me sentía nerviosa, ni tenía razones para estarlo x nada. Empecé a dar vueltas sobre el colchón, mientras seguía pensando en la misma canción de Ismael Serrano, en lo que ya había pensando subiendo x las escaleras, que no sabía porqué me iba a dormir a ese piso (a quién le hacía el favor en realidad, a T. o a mí, o era mejor que me quedara en mi casa todas las noches), en el insomnio que me estaba dando.
Después de unos minutos miré al móvil cargándose sobre la mesita, y lo que iba a suceder a continuación se mostró claro ante mí en un instante. Algo muy fuerte en mi interior sabía que en ese momento, de todos precisamente en ése, tenía que mandarle a ella un mje. Y no esperaba respuesta, pero la tuve. Entonces supe que había hecho exáctamente lo que había querido hacer durante toda la noche, y la canción esta vez surgió de mis dedos a un segundo mje. Dejé el móvil en la mesa, me volví a estirar en la cama y me eché a llorar.

No era sólo que en ese momento, de todos precisamente en ese, en que estoy abriendo nuevas puertas en mi vida, me diera cuenta de que era cuanto más deseaba tenerla cerca; también era todo lo demás, casi en igual medida, el haber estado tantas veces tan mal y tan sola en esa misma cama, el notar lévemente que una parte en el fondo de mí esta asustada aún.
No pensé que nadie me fuera a abrir la puerta, ni nada x el estilo. En algunos instantes admiro mi capacidad para aislarme del mundo.
Encendí la luz, cogí una libreta y me puse a escribir. Más...en unos segundos pasó x mi mente todo lo que quería expresar, y a los siguente estaba totalmente en blanco. El relog marcaba la 1:22. Realmente estaba cansada.
Así que volví a apagar la luz; sería una hora después cuando caí dormida al fin.

A las 7:15 en pie. Qué ojeras. Qué sueño, no podía moverme.
En cuando llegué a mi casa bastantes horas más tarde, lo primero fue poner en el equipo la canción de isma. ¿Que qué canción?...

Ahora que la adolescencia es un septiembre lejano,
humo de cerveza en un portal, un verano inacabado.
Algunos años en la facultad de ciencias,
papeles escritos, ron de Cuba, hojas de hierba,
un tren dormido en una vía muerta,
la luz de la ventana azul que siempre estaba abierta.

Ahora que quedan tan lejos las playas de Corfú,
las estaciones de trenes de Praga, Hamburgo o Estambul,
los viajes que trajeron a otros vistiendo nuestros cuerpos,
la luz de una cafetería, los amores conversos.

Ahora que te cansas y las piscinas cierran,
y apura el último baño la luz de las estrellas.
Ahora que regreso a los lugares a donde quise huir
y nadie me espera allí.
Ahora que casi llego a fin de mes,
que amo a una mujer.

Que amo a una mujer.

Ahora que pago las facturas, que me besé en La Habana,
que sueño con Lacandona, que ya no escribo cartas,
que cumplimos más añós que promesas,
que se hunden nuestros corazones como la vieja Venecia,
que llego tarde a los cines y al fin del planeta,
que alquilo un pequeño piso en un castillo de arena.

Ahora que duelen las resacas y cortan como una navaja.
Ahora que nadie nos saluda por los bares de Malasaña,
que pido auxilio, besos y comida por teléfono,
que fumo flores y lloro a veces mientras duermo.
Ahora que tiemblo como un niño abandonado.
Ahora que viejos amigos nos han traicionado.

Ahora es el momento de volver a empezar, que empiece el carnaval,
la orgía en el Palacio de Invierno, de banderas y besos.
Se cayeron mis alas y yo no me rendí,
así que ven aquí,
brindemos que hoy es siempre todavía,
que nunca me gustaron las despedidas.

Espirales de humo

Tal vez haya cosas que no existan para ser explicadas con palabras.
Esos trances, estados del alma, en que todo se une.

Paz. No sé, no se me ocurre otra palabra mejor. En medio del más absoluto de los kaos, elevándote, se puede llegar a sentir una paz del alma infinita; siendo incapaz de contenerse a sí misma, produciéndote incluso lágrimas, siendo x unos instantes...bendita, eterna.
Es en esos momentos que sé que existe Dios. Allí arriba, en alguna parte del cielo, que mis ojos observaban absortos, inmóviles, porque no les hacia falta desplazarse. El paisaje lo envolvía todo, la música lejanamente distante, los pensamientos, flotando...flotando x encima de mi espíritu, de las nubes rojas en un crepúsculo radiantemente azur, de toda razón y todo sentido de la existencia.

¿Místico? sí. Mi alma pugna x levantarse de sus cenizas, y en su intento, arrastra todas las luces que encuentra a su paso, todo lo que va sintiendo en su camino, que es bastante, y bastante bello.
Cuánta belleza hay en el mundo, Dios. Cuánta belleza. A veces creo que va a partírseme el corazón.
Entiendo, entiendo. Quizás sólo yo sepa el profundo significado de esas palabras, pero eso forma parte de la curación de mi alma, de la comprensión.

No dejo de hacerme preguntas, no. Sigo preguntando x ella a las estrellas, haciendo cábalas sobre los sentidos que hay a mi alrededor, recordando y soñando. Todo forma parte...de todo, de la vida, que realmente está perfectamente diseñada, aunque esa no sea la palabra ni tan siquiera el término. Creo que a veces descubres que las dificultades que tanto has odiado te han enseñado mucho...en realidad tanto, y de otra forma no hubieras aprendido, no hubieras visto tanto...al aclarársete los ojos, al haber encontrado nuevas puertas y ventanas abiertas.

Sí, somos humanos. Soy humana y x tanto, a veces pronuncio nombres, a veces tiemblo. La ventana está abierta, quiero sentir el frescor del aire de ésta noche templada, en que sigo viendo horizontes nuevos. En que sigo deseando con todo mi ser viajar, conducir un coche e ir a cualquier parte, diluirme en la Naturaleza sea aquí o en un distante continente, impregnarme de humanidad, de vida. Quiero vencer mis miedos. Quiero vencerme. Quiero vivir.
Y una hora atrás de estas líneas, me he tumbado bocarriba en la terraza sobre el tejado, de cara a las estrellas, dibujándolas con un dedo, recordándola también a ella sí, preguntando dónde estará, imaginando que las bocanadas del cigarro adquirían formas fantásticas, cerrando los ojos con un cenicero encima del estómago y los brazos abiertos escuchando el silencio, soñando todavía despierta...y entre mis pensamientos, sobre mí, espirales de humo alejándose.

A la luna, a tí, a todo, a nadie...

a veces es sumamente difícil ser fuerte...

La regla

Sí, se merece un post la hija de puta. Después de colarse x tus bragas todos los meses unos cuantos días sin preguntarte si quieres compartir esa zona de tu cuerpo con ella (porque vamos, yo esa zona en particular si la comparto con alguien o algo desde luego es para otros fines, donde los gritos si los hay son de placer no de horror), la verdad que es lo mínimo sí, un poco de comunicación cuando se establecen lazos tan íntimos y húmedos.

Además, hay que joderse, x si el dolor de cabeza, la mala ostia, la hipersensibilidad, el dolor ése que es igual que si te estuvieran retorciendo los ovarios (los muy cabrones), el no poder moverte, no fuera suficiente, es en estos alegres momentos de intercambio de sensaciones con tu cuerpo cuando te da x pensar en tu ex-novia volviendo a follar esta vez sin tí, diciéndole a otra seguramente las mismas cosas que te decía (pensamientos saludables y animosos en los que siempre te muerdes las neuronas para no escucharlos, porque ya sería mucha la energía positiva con tu cuerpo, oye), o x poner otro ejemplo menos escabroso y más bonito, en los próximos exámenes y la cantidad de papeles que ahora mismo no puedes coger porque es posible que te explote la cabeza, algo que podría ser positivo x otra parte, porque digo yo, si es en estos dulces momentos cuando las hormonas y la cabeza en general hacen que tu imaginación vuele a imágenes tan impresionantes como esas (tu ex-novia follando, claro, tú eres tan masoka como para vislumbrar lo que más daño te podría hacer; y tus éxamenes, también algo muy alentador; o ya puestos, mil pensamientos sobre la vida, la muerte, el vacío etc), ¿para quieres que siga encima de tus hombros? hombre, x lo menos esparcida en pedazitos te sirve para hacer un puzzle que te cagas, y pasar el tiempo.

¿No será que la sangre llama a la sangre? y x eso en estos instantes, es cuando mejor te sentirías cortandote las venas, x ejemplo. No, nada de escandalos, no soy la primera mujer que lo ha pensado (y que no me digan lo contrario, que más ganas me dan, jeje); además, trankilidad, hay un pensamiento mucho más, si se me permite la palabra ya que estamos hablando de asuntos bajos -más que nada x el sitio-, lujurioso si cabe...arrancarte los ovarios y ser una mujer libre. Sí, ver a los hijos de puta, ahí, solos, indefensos, pasando frío, teniéndolos cogidos x los huevos y nunca mejor dicho...y tú con tu cara de mala leche liberada...ahhh, puede que fuera mejor que un orgasmo...llamarles a la cara todo lo que les llamamos cuando metemos la mano en el paquete de Evax una y otra vez...Que esa es otra, porque mira que tener que soportar cosas como un tío (con todos los respetos, yo sé que vosotros también sufris mucho con otras cosas, pero es que esto es tortura) diciendo que él a su novia le da mucho amor y chocolate....ay Dios...o cuatro o cinco lokas correteando x el campo x que llevan la nueva Evax fina y segura...o aquel ¿a qué huelen las nubes? de Ausonia...¿a qué coño van a oler las nubes? a regla so gilipollas, igual que todo lo demás en estos días, que hasta te miras en el espejo y te hueles a regla.

En fin...querida regla...hablamos poco tú y yo...casi siempre se resume en un ¡¿ya?! y una generosa mancha roja x tu parte...Sí, ya lo sé, tú no tienes la culpa, no querías, no entiendes porque te pasa eso, me tienes cariño...sí, todas decís lo mismo...no me haces caso, ya no es como antes (en eso tiene razón, antes pensaba que me iba a desangrar, ya sé que el cuerpo humano tiene muuuucha pero que muuuuucha sangre que nunca deja de salir)...Nada, que tenemos que jodernos tú y yo, condenadas a vivir la una con la otra, x muchos años. Ayyyy....

Escucha...

Llámame, nómbrame,
búscame,
necesítame,
amáme,
deséame,
saboréame, bébeme,
mírame, vuélveme a mirar,
abrázame, una y otra vez,
suéñame,
quémame,
ilumíname,
vacíame, lléname,
siénteme, bésame, ráptame,
tócame,
háblame, de tí, de todo, de cualquier cosa,
bromea conmigo, juega,
enfádate, reconcíliate,
acaríciame...despacio,
susúrrame, grítame,
tírame sobre la cama, derríteme,
llora, riéte, celebra conmigo
las derrotas y amaneceres de la vida,
mójame con tu lengua,
sedúceme,
encuéntrame,
siémbrame,
enséñame,
agárrate,
entiéndeme,
créeme,
cállame.

Quiero llamarte, nombrarte,
buscarte,
necesitarte,
amarte,
desearte,
saborearte, beberte,
mirarte, volverte a mirar,
abrazarte, volverte a abrazar,
soñarte,
quemarte,
iluminarte,
vaciarte, llenarte,
sentirte, besarte, raptarte,
tocarte,
hablarte, de mí, del mundo, de cualquier cosa,
bromear contigo, jugar,
enfadarme, reconciliarme,
acariciarte...despacio,
susurrarte, gritarte,
tirarte sobre la cama, derretirte,
llorar, reírme, celebrar contigo
los amaneceres y derrotas de la vida,
mojarte con mi lengua,
seducirte,
encontrarte,
sembrarte,
enseñarte,
agarrarme de tí, de tu mano,
entenderte,
creérte,
callarte.

Mañana toca volver clase después de la Navidad. Bueno eso es relativo...relativo a la hora que vaya, jajjaja. Buenas noches.

El arte de ser masoka

Mientras bajaba x una calle solitaria, nocturna, cual vampira a la caza de su primera presa, iba pensando que hay tres tipos de mujeres de las que te puedes enamorar:

Las "esto es demasiado bueno para que me esté pasando a mí": Las llamo así, porque literalmente piensas eso. Son las que cuando llevas un tiempo a su lado, conociéndolas, mirándolas, te hacen preguntarse si no será un ángel que se ha despistado en la tierra. Entonces caes en la sublime cuenta de que estás totalmente enamorada de ella; no dejas de soñarla, es el tipo de chica que admiras, que nunca crees que elegirá estar al lado de alguien como tú.
Pero normalmente sucede el milagro, y cada noche das gracias x estar junto a ella, rezas para que no desaparezca nunca, le hablas a todo ser viviente de sus encantos. Te hace recurrir a frases tontas, a plantearte si alguien así, tan absolutamente perfecta puede existir y estar junto a tí; porque ella es pefecta, siempre, y única, y especial, y guapísima -o a tí te lo parece-, la chica x la que harías cualquier cosa, subir al Everest en bragas si es preciso, bajarle todas y cada una de las estrellas. Porque x mucho que tú te preocupes x ella, mil veces se preocupa ella más x tí, tiene esos detalles que te vuelven loca, ese justo punto de pasión que te derrite, ese amor incondicional que siempre habías deseado, y siempre te sorprende.
Es el tipo de chica más difícil de encontrar. Sucede, que se enamore de tí o no, consigue sacar lo mejor de tí al estar con ella o al intentarlo. Podrás estar con ella toda la vida o ser su amiga, creo que la cosa está más o menos a un 50% de posibilidades, aunque.....cuando la suerte te deja frente a tus manos a una chica así, normalmente te suele quedar la suficiente para probar lo maravillosa que es la vida a su lado, aunque sólo sea unos instantes eternos.

La sencilla: Las hay de varias clases, la fácil (rollo de unos días), la desesperada (o deprimida dependiente), la insulsa, la normalita x decirlo de alguna manera. No dan ni reciben grandes pasiones, no matarías x ellas ni ellas lo harían x tí, igual podeís estar una noche que 6 años, pero no mucho más. Te aportan tranquilidad, pequeñas satisfacciones, son las "buenas", las que te llamaran todos los días o se enrollarán contigo una noche sin problemas, pero no te quitaran el sueño. Son las prescindibles, para que nos vamos a engañar, las que pueden enamorarte, sí, pero con un amor de alas cortas. Tarde o temprano te pedirá demasiado o demasiado poco y tú no querrás, o no te importará. O bueno, puede que sea exactamente el tipo de relación que necesitas, relativamente segura o insegura (dependiendo de la calse anteriormente dicha), sin demasiados problemas en un periódo de tiempo largo, sin demasiadas ataduras en cualquier caso (esas las traen las pasiones), un remedio para tu soledad de soledades, para tu cama en muchas ocasiones, para tu olvido de otras o para tu conciencia en otras tantas. Son las que enamoraran x su sencillez, porque son chicas corrientes, sin demasiadas complicaciones a la hora de empezar una relación.
Muchos matrimonios y parejas se hacen así. Me sugiere un 70% o 80% de efectividad, pocas veces no conseguiras tener un ligue de una noche o un noviazgo con una de estas chicas. Otra cosa es que eso satisfaga verdaderamente o no.

Las "complicadas": Bueno, son tu perdición. Creer otra cosa es una enorme y brutal equivocación. Te frustrarán, te perderán, te destruirán en la mitad de las veces, te abocarán a abismos nunca antes explorados. Tienes mínimas probabilidades de salir bien parada, pero aún así si te enamoras, lo harás hasta el rincón más profundo y enfermo de tu alma, y nada en este mundo o en el otro, impedirá que te lanzes de cabeza hacia su interior, a conquistarla, a hacerla tuya. Nunca jamás podrás retenerla, y siempre lo intentarás, siempre lo querrás. Son las que te enferman de deseo, las que hacen que te hierva la sangre, las que te elevan a la cumbre más alta o te hunde en la profundidad más infernal. Crees que te salvarás, tú, ella, pero no lo harás en la mayoría de los casos. Muchas veces querrás olvidar sus ojos, sus besos si te los han dado, su cuerpo si lo has probado. Son "las malas", las perversas a veces, siempre las extrañas, las misteriosas, las kaóticas, en muchas ocasiones, las demasiado filosóficas o incluso poéticas.
Son las imposibles de las que hablaba Bécquer, las musas ausentes de los poetas, los amores lokos...lokos, lokos de pasión, de deseo, de descifrar ése misterio que ves en ella, de querer pasarte la eternidad únicamente diluyéndote en su mirada, de alcanzarla (jamás como amiga) aunque en ello, durante o después te rompas en mil pedazos.
A veces puedes conseguir estar a su lado, que tu amor le baste, que se quede contigo y seais las dos personas más felices de la tierra. Pero sólo a veces. La mayoría de ellas dejarán una huella altamente imborrable en tu camino, pero no vivirán la vida contigo, x más que eso te quiebre, te duela.
Indudablemente se llevarán tu corazón. Nunca terminarás de entenderlas, harías también como en el primer tipo, cualquier cosa x ellas, o bien conseguirán sacar lo peor de tí con el tiempo. Son los extremos. Capazes también de hacerte vivir cosas maravillosas. A veces las más débiles en el fondo.

El arte de ser masoka, hállase aquí. Es éste tipo de mujeres, las complicadas, las imposibles (aunque sea en sentido metafórico), las que atraviesan mi corazón, las que de una u otra forma, me arrastran. Decía HIM en una canción: no heaven can help us ready [...] to lose all for a kiss so fatal and so warm, it's heartache every moment from the start to the end with you [...], we sense the danger but don't want to give up.
Claro, no todas las complicadas son iguales; yo lo sé muy bien ya que siemopre que me he enamorado, a sido de ellas. No todas son dañinas, algunas te hacen más fuerte, y pueden llegar a quedarse a tu lado o tu al suyo como perfectas a migas, aunque siempre....siempre algo queda, es algo innegable. De lo que mucho ardió quedan muchos rescoldos. Algunas complicadas son muy sanas, nada kaóticas, sólo demasiado filosóficas o extrañas; encantadoras, con ese misterio tan irresistible. Algunas llevan dentro verdaderos ángeles; lo son.

[¿Que qué tipo soy yo? jejejje...no lo sé, imagino que depende de qué persona me esté mirando...en cualquier caso soy algo complicada, cuando te enamoras de mujeres complicadas tú también te vuelves así en algunas cosas...no lo sé...sólo sé que daría todo x amor (correspondido...y a veces sin que lo sea), que podré ser todo lo extraña y filosófica que yo quiera, pero hay algo que me vence invariablemente, el amor.]

Tierra, fuego, agua

Qué destino vuela,
qué tiempo anda sobre mí,
no lo sé,
pero si de mis ansias dependiera,
tu camino y el mío
harían juntos barro,
no sé hasta cuándo,
no sé hasta dónde,
pero formarían castillos,
sueños,
fundirían amaneceres,
mezclarían sus alientos
hasta ser el mismo.,
hasta ser tierra, fuego, agua
y sembrarnos, encendernos, diluirnos
sin excusas, sin derrotas,
sin jurar que siempre me amarás mañana
sino hoy,
sin desear otros ojos que no sean los tuyos
en este instante,
y dormir tranquilas,
saber que eres de mi alma semilla, llama, mar,
que de la tuya soy semilla, llama, mar,
y esparcir, iluminar, fluir
cogidas de la mano, libres.

Eso que me falta

Eso que me falta, que no tengo. Esa chispa, que tiene la gente a la que miro. Ese algo, que te impulsa a observarles, a querer y buscar llamar su atención, que te tiene en vilo. Eso que me falta, ese cosquilleo que se produce en otras personas cuando están a tu vera, que las mantiene ahí, que le hace preguntarse cuándo, cómo, dónde será el próximo encuentro. Ese aura que te envuelve cuando encajas en el lugar en que estás, que te da valor (en todos los sentidos), confianza, que puede ser imán. Eso que me falta, que te hace sentir bien, no como una hormiga en mitad del agua, o un caracol en el desierto. Que te salva de sentirte desplazada, inferior, sin interés. Eso que veo en todas las personas menos en mí. Eso que no sé cómo se llama, pero que es fundamental para la sana supervivencia. Eso que me falta.

Atrás...en los bosques

Escocia...
Aquí teneis dos canciones, que a mí personalmente me transportan, para bajar.

Blacksmith
She moved throught the fair

Atlanthis & Eigual, crónica de una cena inesperada

Este post tendría que haber sido compartido junto con eigual , pero creo que al final sólo va a figurar nuestra extraña noche aquí. No es que tenga más ganas de escribir que ella, pero para bien o para mal tengo la tonta costumbre de cumplir mis promesas, aunque a veces eso de bastante igual.

7 de la tarde. Hace un frío de mil demonios, y aunque al bajar del bus ella dice que no tiene, yo me estoy congelando. Mi cabeza se pone en función y se me ocurre una especie de tour nocturno a pie x el Albayzin, así que allá vamos las dos, figuras borrosas x los callejones de Granada, yo intentando quitarle su móvil nuevo, haciendo fotos, ella abriendo la boca ante las casa antiguas, el empedrado húmedo de la calle, mis gracias, jeje.
Ambas tenemos hambre, así que nos lanzamos a la búsqueda y captura de un sitio asequible para medio cenar, cenar vaya, y eso tratándose de nosotras dos significa -además de perdernos- dar más vueltas que una peonza, sin encontrar nada, y sin saber qué hacer. Pero bueno, el tema es que nos vamos a la caza de nuestra cena, y una de dos, o encontramos sitios pijísimos o antros estranbóticos, como una pizzeria con decoración estilo "este es el salón de tu casa pero en la calle".
Era para vernos, meternos x todas las calles cerca de Plaza Nueva, encntrar un sitio abierto y casi correr hacia él como el cazador al que se le escapa el conejo x el monte, pararnos en la puerta con cara de circunstancias, husmear el interior y dar paso al momento clave: ¿qué coño hacemos?, ¿entramos?...¿te gusta a tí? ¿nos vamos?....jeje...
Nada, que al final hemos dado con una bocadilleria que no tenía muy mala pinta; entramos y nos dicen que no hay mesa libre...nos miramos...nos damos una vuelta...volvemos...un peazo estúpido de camarero nos dice que acaban de abrir el comedor...así que subimos. Bien, el comedor, enorme x cierto, está absolutamente vacío salvo x nosotras y el camarero que nos sigue a cierta distancia -a mi me ha recordado al policía que vigila al "limpia" en un semáforo- con cara de "qué narizes hacen dos tías como estas aquí cenando solas".

Eigual esocge la mesa, me gusta que lo haga ella porque siempre elige la mejor, la más especial, la que yo misma escogería entre todas. Ésta estaba al lado de una ventana que daba a la calle (era un segundo piso), y se veían abajo los hippis con sus puestecillos y los extranjeros con sus botellas de vino barato. El camarero nos deja las cartas sobre la mesa, nos pregunta qué vamos a beber y nosotras respondemos que 2 cocacolas. Bueno, nos hemos empezado a deskojonar cuando hemos abierto la carta, y era más alta que nosotras. Después se nos ha ido un poko la risa cuando hemos mirado los precios, jejejje. De 15 euros para arriba, platos incomibles. Pero oigan, ¿no saben ustedes lo que es la comida? ¿un vulgar y sabroso bocata? ¿una tortillita de patatas de toda la vida?....yo sólo leía nombres rarísimos con fotos más rarísimas al lado...Ui Ui, pensaba yo, estos se han creído que somos el príncipe y la Letizia Ortiz, o el Pocholo con los millones en Marbella.

Ui Ui...¿qué hacemos?....eigual y Atlanthis deskojonás...ya teníamos la cocacola en el vaso....Pues nada, a inventar una excusa para irnos, made in eigual.
Situación: el camarero había venido ya 3 veces mientras alucinábamos con la carta..."¿saben ya lo que van a pedir?" mirada de impaciencia incluída. En éstas, que viene la 4ª, recordándome a mi madre cuando me pregunta la 6º vez si he hecho lo que me dijo que hiciera (y obviamente no lo he hecho), y eigual -que yo no sé como ha hecho para no deskojonarse viva en la cara del tío, ni yo tampoco para ser sincera- va y le dice que no habíamos visto la hora, que es muy temprano (eran las 8.30) y hemos pensado que vamos a volver dentro de un rato...-sí, ha oído bien, jeje- dentro de un rato para cenar entonces, sí. Él, unos 30 años, mirada de desdén infinita, malaleche rebosante a duras penas controlada en silencio, con gesto ofendido nos ha retirado la carta, ofendido....o simplemente cabreado de la ostia.

Lo que yo me he reído cuando las estaba guardando en el otro extremo de la habitación, y eigual y yo hemos cruzado miradas. Joder, cómo nos ha costado disimular las carcajadas. En fin, la cocacola estaba fresquita, y ella se estaba comiendo unas aceitunas que había en la mesa, más grandes que ella y que yo. El tío...ays, el tío cada 2 putos minutos (y no exagero, sino que lo diga ella) estaba encima de nosotras, que si arreglando un mantelito, que si cuadrando una silla x aquí, que sí parándose con los brazos cruzados x allá, sin quitarnos el ojo de encima, observándonos con el mismo desprecio que un biólogo mira al insecto que acaba de pinchar con un alfiler y meter en un cajita, para su colección.

¿Que porqué nos hemos quedado, y hemos pagado y todo eso? pues porque nos hemos deskojonado como nunca en nuestra vida. Porque sólo hubiera faltado que yo hubiera hecho eso con lo que tanto bromeo, poner una velita de estás redondas y bajas encima de la mesa, estilo cena romántica (aunque no seamos pareja ni nada que se le parezca), para que al hombre le hubiera dado un infarto de la indignación y el sobresalto, jejejje. Joder...podríamos haberlo hecho, jajajjaja. Nada, que aquí os dejo la foto de la cuenta, que x cierto nos han clavado, o dicho con más propiedad a eigual, ya que la capulla se empeña en pagar Todo lo que nos comemos juntas -alega que ella trabaja y yo no, pero sigue siendo una capulla-.

Es que las hemos guardado de recuerdo, jajjjajjja.
En fin....después hemos dicho que teníamos que cenar de verdad, jeje, así yo he dirigido el barco hacia una bocadillería que conozco; lo que pasa que en el camino me he encontrado a una amiga del insti con su novio, la que resulta era también amiga de otra amiga mía, y ha estado media hora deshogándose conmigo, porque llevan no sé cuánto tiempo peleadas x culpa del novio de la otra chica y en fin....la mujer tenía que decirme lo que piensa del tema. Eigual creo que ni gesticulaba, entre el frío, el hambre y el aburrimiento de escuchar un follón entre pandillas que ni le va ni le viene. pero bueno, yo creo que al final ha merecido la pena la espera....el bocata de lomo con queso estaba de vicio.
Y nos hemos tenido que seguir deskojonando, porque a veces es la mujer más ingenua del universo...y yo a veces soy muy borde, jejeje, y de algo tan tonto como que le apetecía un masaje en los pies se puede sacar algo de alto contenido X que me abstengo de reproducir aquí, jeje, que lo escriba ella si quiere.

Lo que sigue ya son sus pensamientos (en su blog) independientes de todo esto, en su viaje en bus a su casa, y los míos al llegar a la mía, que se resumen en dos: uno, me han hecho pensar las cosas que me ha dicho la amiga que me he encontrado (y espero volver a ver pronto; dos, leer el último post de eigual también me ha hecho pensar, todo lo que hay en mi interior respecto a A....cosas que ahora ya esta noche no me apetece escribir.
Prefiero pensar en las cosas que he decidido hoy, que dentro de 2 años cuando termine la carrera me voy a ir a África a hacer ayuda humanitaria (decisión altamente irrevocable, muy pocas cosas -x no decir una sola- me harían cambiar de opinión), que cuando vuelva de al menos año y medio o dos años allí pondré un local de ambiente en Granada con eigual de socia o sin ella, y mientras escribiré y trabajaré x las mañanas de psicóloga; y ésa será mi vida. Lo he decidido, y como buena capricornio que soy, lo haré.

deja que pasemos sin miedo...

Acerquémonos, no nos oirá. Está pensando en canciones de Antonio Vega, absorta en ella misma, en el cielo que contempla. Piensa que ojalá todo fueran sueños tontos, susceptibles de deshacerse en papel gastado al despertar. Todo cuanto conoce: su fragilidad, la torpeza de su escisión con este mundo enorme, el silencio de su voz, en tantas pesadillas sordas.
Su cabeza da vueltas, perseguiendo pájaros invisibles, atrapando nubes con formas que se le escapan, abrazos de lo que sólo consigue escalofríos en su piel.
A ratos sonríe, a tragado muchas lágrimas, los colores del firmamento cambian y le dice a los árboles que a cada una que resbala x su garganta, se hace más fuerte. Y aprieta los dientes, para que no se escapen.

A aceptado su destino, se lo dice al viento. Entenderá los mares infernales que la llaman cual fantasmales sirenas, la imaginación que la atormenta, el deseo que no es campo fértil sino rayos y truenos que ha de cargar porque le pertenecen.
Tal vez un amanecer incierto y difuso, le traiga un día un sueño recién lavado, azul, brillantemente verdad y salvaje, que de profundo no se vaya con la siguiente marea, y sobre la arena lo tenga en las manos, azul, limpio, fundido con el sol y con ella.

No sabe que estamos aquí, no sabe que la vemos. Se pasa una mano ligeramente fría x las cejas, lentamente, como si fuera entonces cuando verdaderamente estuviese pensando ¿cansada? no sabemos, pero observamos x el resplandor en sus ojos, o mejor dicho x su ausencia, que no duerme mucho, que piensa demasiado, que tiene frío y no es del tiempo, en su postura, la forma de sentarse, el extraño muro que percibimos que ha forjado con su mente para completar la separación que ya siente que ha tenido siempre y que está destinada a tener con la vida, intuimos que ése frío se debe al polvo que tienen sus manos que hace mucho que no vuelan sobre otro alguien, al infierno de ausencias donde cree que está y x el que rechaza los paraísos desiertos que piensa en sus delirios que no habitará, a la falta de amor quizás que pueda albergar su corazón, de despreocupación, de sencilla alegría desprovista de melancolía.
Nos recuerda a esos suicidas que están convencidos de su sino y lo acogen con inevitabilidad, resignación y casi placer en ello.

Quizás, así, ahora, cuando nadie la ve, y cuando tiene gente alrededor, nos recuerde la enfermedad del lobo estepario, incluso ella misma lo cree, cuando el crepúsculo baja, y mide el ángulo formado entre la luna y ella, y ve que no tiene ni cuándos, ni cómos, ni dóndes, sólo su mutua soledad, llegando a reconfortarse en ello, aprenderá, luchará con las sombras si es lo único que tiene, amará aquello en que sus pupilas se poseen, respirará el aire que le quede.
Nos lo dice, nos lo dice aunque no lo sepa, que tiene miedo, miedo a estar sola. Miedo a atravesar la vida sin nadie que la vea, que sea testigo, que se duerma tranquila sobre su pecho x las noches y le dé así en su haber algo bueno en su paso x la tierra.
Le aterra, y está convencida de que será así, estrechándose cada vez más el espacio entre sí y la luna, solas, cubiertas de igual márfil. X eso lo esconde, esconde esa certeza en lo más hondo de su ser, y aparta la mirada.

Vive en un mundo lleno de dragones que no puede matar, de brujas, de laberintos oscuros, de escaleras en ángulos imposibles.
Y cree, nuestra chica, porque ya es un poco nuestra, que de todo eso saldrá más fuerte, más grande. Que al menos tiene que tener eso.
Y entonces alguna luz se ilumina en su interior, intenta ignorar la materia oscura que se revuelve en su interior, y somos conscientes de la claridad y la esperanza que acuden en su incierta salvación, al decir que en tal universo también ha de haber mucha belleza, para contrarrestar. Y sabe que es así.
Acude una canción a su mente, se tumba de espaldas, se siente mejor.

dónde nos llevó la imaginación, donde con los ojos cerrados se divisan infinitos campos...donde se creó la primera luz, germinó la semilla del cielo azul, volveré a ese lugar donde nací...de sol, espiga y deseo, son tus manos en mi pelo...de nieve, huracán y abismos, el sitio de mi recreo...